Picasso es un perrito de cinco años de edad que nació con su naricita torcida, una condición especial que le ganó el rechazo de sus dueños, arrinconándolo a la muerte segura en un triste refugio junto a su hermanito, enfermo también.

El adorable perrito nació con una «sonrisa» muy especial que no todo el mundo podía comprender

perrito

Picasso y su hermano pronto se encontraron en la lista de eutanasia del refugio. Pero, justo cuando llegaría su final, Liesl Wilhardt llegó como un ángel a sus vidas para salvarlos a tiempo. Los trasladó a Luvable Dog Rescue, organización de rescate de la que es fundadora y directora.

Tristemente, al hermano de Picasso le ocurrió algo doloroso e inesperado. Y el perrito murió de forma repentina debido a un aneurisma.

Fue entonces cuando Liesl descubrió su vocación de rescatar todo animalito con deformidades especiales, porque estaba convencida que con un poco de dedicación y amor, la vida de estas criaturas sería un auténtico testimonio de lucha e inspiración para otros animalitos vulnerables. E incluso, para tantas personas que necesitan que les devuelvan la esperanza de vivir.

Cuatro años después, otro cachorrito llamado Newt, rescatado por otro refugio, llegó a manos de Liesl, después de que se quedara sin mandíbula superior.

El pobrecito fue aplastado por su propia mami al nacer, lo que le dejó con una apariencia lamentable, además de severos problemas de salud.

Era como si el destino se hubiera encargado de unir a Picasso y a Newt, para comprenderse, ayudarse, alentarse y amarse incondicionalmente, dentro de su severa deformidad que compartían.

Dos perritos con graves problemas faciales que se han convertido en los mejores compañeros de por vida

A pesar de sus graves deformidades en sus caritas, ambos disfrutan de una vida feliz en las 22 hectáreas de terreno, donde funciona el refugio de Liesl, en Oregon, EE. UU.

A pesar de lo difícil que ha sido para ambos hacer vida normal por sus cicatrices y los extenuantes tratamientos médicos, especialmente los de Newt, el par no puede amarse más y ser los peluditos más dichosos del mundo.

Las adorables fotos y vídeos que publica Liesl en la cuenta de Instagram de Picasso, demuestran cómo son sus días, jugando, paseando, y hasta recolectando fresas juntos.

“Fue un milagro que Picasso sobreviviera y creciera fuerte, ya que habría sido extremadamente delicado para él amamantarse de su madre», dijo liesl.

Para Newt, las complicaciones han sido mucho mayores, y no necesariamente sólo por no tener mandíbula superior.

Pero, lo grandioso y maravilloso, es que tanto Picasso como Newt son una fuente inagotable de amor. Cuando están en público, son extremadamente sociables, buscan las caricias a todas horas y adoran hacerse amigos de las personas.

Cuando la gente los ve en la calle, se quedan en shock. Regresan a verlos un par de veces, y se quedan maravillados al contemplar cómo han aprendido a vivir con sus limitaciones, y hasta saben chantajear a Liesl cuando quieren algo.

Como buenos hermanos, también aman pelearse, y encaramarse el uno sobre el otro, pero sobre todo lo que les da paz y felicidad es saber que siempre se tienen cerca.

«Adoro a Picasso y Newt con todo mi corazón. Ambos son perros maravillosamente cariñosos, alegres, inteligentes y divertidos”, dijo Liesl, quien los llama amorosamente «los amigos torcidos».

Picasso es sin duda el mejor hermano mayor de todos los perritos deformes que Liesl acoge. Y se ha convertido en el perro más cariñoso, sensible y adorable que puedas imaginar.

Es un animalito que acepta orgulloso sus diferencias y las usa para ayudar a otros. Ahora se ha convertido en un perrito de terapia para niños discapacitados, humanos y otros perros. Y Liesl no puede sentirse más que conmovida al ver los milagros que obra su hijo deforme, al que un día quisieron sacrificar. ¡Imposible no emocionarse!

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